Estamos en guardia, porque la situación lo necesita. Porque en este momento, también como Iglesia ayudamos a los demás. Con oración. Con sacrificio. Con acompañamiento.
Pero también estamos de guardia porque nos turnamos. Porque cuando repartimos el trabajo, es más fácil. Cada día, una parroquia. Y llega nuestro turno. Este viernes, día 27. Todo el día.
Por la mañana, hacemos una pequeña oración. Y encomendamos al Señor todo lo que hagamos en el día. Por los enfermos. Por los que no entienden. Por los que tienen miedo. Por los que se sienten solos y desamparados. Por nuestros hermanos de toda la Diócesis. ⬇️⬇️
A las 12 del mediodía, haremos sonar las campanas, como llamada a la oración. Pero también como señal de esperanza. Invitamos a sumarnos al rezo del Angelus.
¿Y los niños? Proponemos que hagan un dibujo, en el que pueden recordar, a modo de homenaje, a todas las personas que, desde dentro de la Iglesia, pero también desde fuera, más están trabajando para ayudar a los demás. Todos los dibujos que recibamos (por WhatsApp) los mostraremos al mundo entero a través de nuestra página web.
Por la tarde-noche, rezamos juntos. En familia. Con la oración que D. Julián nos ha propuesto para esta ocasión. ⬇️⬇️
Y tú... ¿Te sumas?
Porque juntos ¡¡siempre es mejor!!
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